La alveolitis es una de las complicaciones más molestas que pueden aparecer tras una extracción dental. Su aparición suele generar dudas, dolor y preocupación en el paciente, especialmente cuando no se entiende bien en qué consiste ni cómo tratarla. En esta guía te explicamos qué es, por qué ocurre, cómo identificarla, qué tipos existen y cuál es su tratamiento. También resolveremos la pregunta más común: ¿la alveolitis se cura sola?

¿Qué es la alveolitis?

La alveolitis es una inflamación del alvéolo dental, es decir, el hueco óseo que queda tras la extracción de un diente o muela. Aparece cuando el coágulo que debía proteger esa zona no se forma correctamente o se pierde prematuramente, dejando el hueso expuesto al aire, la comida y las bacterias.

Esto no solo retrasa la cicatrización, sino que genera un dolor intenso y constante. La alveolitis suele surgir entre el tercer y quinto día después de la extracción, y requiere atención odontológica para evitar complicaciones mayores.

Causas más frecuentes de la alveolitis

Aunque cualquier extracción puede derivar en una alveolitis dental, existen factores que aumentan significativamente el riesgo. Las causas más comunes incluyen:

  • Mala higiene oral tras la extracción.
  • Enjuagues intensos o escupir en exceso los primeros días.
  • Fumar o consumir tabaco.
  • Infecciones previas en la zona.
  • Extracciones complicadas, como las de muelas del juicio.
  • Uso de anticonceptivos orales (en mujeres).
  • No seguir correctamente las recomendaciones postoperatorias.

Síntomas de la alveolitis: cómo reconocerla a tiempo

El síntoma más característico de la alveolitis seca es un dolor agudo y persistente que se irradia hacia el oído, la mandíbula o el cuello. A diferencia del dolor habitual postextracción, este empeora con el paso de los días en lugar de mejorar.

Otros síntomas frecuentes incluyen:

  • Mal aliento o sabor desagradable en la boca.
  • Exposición visible del hueso en la cavidad (puede observarse en alveolitis dental fotos).
  • Inflamación leve en la zona.
  • Sensación de vacío o hueco en la encía.
  • Dificultad para comer o hablar por el dolor.

Tipos de alveolitis: seca y húmeda

Existen principalmente dos formas clínicas de alveolitis:

Alveolitis seca

Es la más común y dolorosa. Se caracteriza por la ausencia de coágulo y exposición del hueso dental. El dolor suele comenzar entre las 48 y 72 horas tras la extracción y puede prolongarse si no se trata correctamente.

Alveolitis húmeda

Menos frecuente y con síntomas más leves. En este caso sí hay coágulo, pero está infectado. Suele haber supuración, inflamación y dolor localizado. También se puede observar pus en el alvéolo.

Ambas requieren atención profesional para aliviar el dolor y acelerar la recuperación.

Tratamientos para la alveolitis: qué hacer y qué evitar

Lo más importante ante los primeros síntomas es acudir al dentista. En ningún caso se debe intentar limpiar o manipular la zona por cuenta propia. Los tratamientos habituales incluyen:

  • Lavado del alvéolo con suero estéril.
  • Colocación de apósitos medicados para calmar el dolor y proteger la zona.
  • Antiinflamatorios y analgésicos bajo indicación médica.
  • En caso de alveolitis húmeda, puede ser necesario un antibiótico.

El tratamiento suele ofrecer alivio inmediato del dolor y favorece una correcta cicatrización. Aunque algunos casos muy leves podrían remitir por sí solos, la alveolitis no siempre se cura sola, y es recomendable tratarla para evitar infecciones o retrasos en la curación.

Cómo prevenir la alveolitis tras una extracción dental

La prevención es la mejor herramienta para evitar esta complicación. Estos son los consejos básicos que debes seguir tras una extracción:

  • No enjuagarse la boca ni escupir durante las primeras 24 horas.
  • No fumar al menos durante los primeros 3-4 días.
  • Evitar bebidas calientes, alimentos duros o pegajosos.
  • No tocar la herida con la lengua ni con objetos.
  • Tomar la medicación pautada por el dentista.
  • Mantener una higiene suave pero constante en el resto de la boca.

Cumpliendo estas recomendaciones, se reducen al mínimo las probabilidades de desarrollar alveolitis seca o infectada.

Factores de riesgo: ¿quién tiene más posibilidades de sufrirla?

Algunos pacientes presentan mayor riesgo de desarrollar esta complicación:

  • Personas fumadoras o consumidoras de tabaco.
  • Mujeres que toman anticonceptivos hormonales.
  • Pacientes con antecedentes de infecciones orales.
  • Extracciones quirúrgicas complejas.
  • Personas con mala higiene bucal previa.

En estos casos, el dentista puede recomendar medidas preventivas adicionales o un seguimiento más cercano.

En Clínica López y Sandoval tratamos tu problema de alveolitis

En Clínica López y Sandoval contamos con experiencia en el diagnóstico y tratamiento de complicaciones postextracción como la alveolitis seca o húmeda. Si acabas de sacarte una muela o sientes dolor intenso y constante, es importante actuar cuanto antes. Nuestro equipo te atenderá de forma rápida, eficaz y personalizada para aliviar el dolor y favorecer una correcta cicatrización.

¿Notas alguno de los síntomas? Llámanos o pide cita desde nuestra web. Estamos aquí para ayudarte a recuperar tu salud bucal.

Preguntas frecuentes sobre la alveolitis

¿Puedo hacer ejercicio si tengo alveolitis?

Se recomienda evitar el deporte o esfuerzos físicos durante los primeros días. El aumento de la presión sanguínea puede empeorar la inflamación y retrasar la cicatrización.

¿Se puede comer con normalidad si tengo alveolitis?

Lo más recomendable es seguir una dieta de alimentos blandos, fríos o templados, y masticar del lado contrario a la zona afectada. Evita comidas duras, calientes o muy condimentadas.

¿La alveolitis puede causar fiebre o extenderse?

Sí, si no se trata, puede derivar en una infección más extensa con fiebre y afectación de tejidos adyacentes. Por eso es importante no dejar pasar los síntomas.

¿Qué pasa si aplico remedios caseros?

No se aconsejan. Pueden empeorar el estado del alvéolo o retrasar el tratamiento adecuado. Ante el dolor o cualquier signo de alarma, lo mejor es acudir al dentista.

¿Cuándo es seguro volver a fumar tras una extracción dental?

Como mínimo deben pasar 72 horas, aunque lo recomendable es esperar una semana completa. Cuanto más se retrase, menor es el riesgo de sufrir alveolitis.

Bibliografía